Electroestimulación en medicina y salud

¿Qué es la electroestimulación?

Es una técnica terapéutica que consiste en la aplicación de impulsos eléctricos de baja intensidad sobre los músculos y nervios con el objetivo de provocar una contracción muscular. Estos impulsos eléctricos imitan las señales nerviosas naturales, estimulando así la actividad muscular. En este sentido, la electroestimulación ha demostrado ser una herramienta invaluable en el campo de la rehabilitación neuromuscular, ya que su capacidad para inducir contracciones musculares de manera controlada la convierte en un aliado fundamental en el tratamiento de diversas condiciones que afectan el sistema nervioso y muscular.

¿Cómo funciona a nivel fisiológico?

Cuando se aplica una corriente eléctrica a un músculo, se despolarizan las fibras musculares, lo que desencadena una serie de reacciones químicas que culminan en la contracción muscular. De esta manera, la frecuencia, intensidad y duración de los impulsos eléctricos determinarán el tipo de contracción y la respuesta muscular.

Tipos de corrientes eléctricas utilizadas:

• Corrientes galvánicas: Corrientes continuas utilizadas principalmente para iontoforesis (introducción de medicamentos a través de la piel).
• Corrientes farádicas: Corrientes alternas interrumpidas que producen contracciones musculares tetánicas.
• Corrientes rusas: Corrientes alternas de media frecuencia que generan contracciones musculares más profundas y menos fatigantes.
• Corrientes TENS: Corrientes pulsátiles de baja frecuencia utilizadas para el alivio del dolor.

Historia.

Los orígenes de esta técnica se remontan a la antigua Grecia, donde se utilizaban descargas eléctricas de peces eléctricos para tratar diversas dolencias. Sin embargo, fue en el siglo XVIII cuando se iniciaron los primeros estudios científicos sobre la electricidad y sus efectos en el cuerpo humano.

Figuras clave en su desarrollo:

• Luigi Galvani: considerado el padre de la electrofisiología, descubrió que los seres vivos generan electricidad, un hallazgo fundamental para entender la función de nuestros músculos y nervios.
• Alessandro Volta: Inventó la pila eléctrica, lo que permitió disponer de una fuente de corriente continua para la experimentación.
• Michael Faraday: Sus trabajos sobre la inducción electromagnética contribuyeron al desarrollo de los primeros dispositivos de electroestimulación.

Beneficios.

La electroestimulación ofrece una amplia gama de beneficios para la salud y el bienestar como lo son:

• Fortalecimiento muscular: Ideal para personas con movilidad reducida, deportistas que buscan mejorar su rendimiento o personas que desean tonificar sus músculos.
• Recuperación de lesiones: Ayuda a reducir la atrofia muscular, mejorar la circulación y acelerar el proceso de rehabilitación.
• Alivio del dolor: La estimulación de las fibras nerviosas puede inhibir la transmisión de señales dolorosas.
• Otros beneficios: Mejora la circulación sanguínea, aumenta el tono muscular, reduce la fatiga y puede ser útil en el tratamiento de incontinencia urinaria.

Aplicaciones.

La estimulación eléctrica tiene múltiples aplicaciones en diversos campos:

• Fisioterapia o rehabilitación: Tratamiento para la mejora y recuperación del movimiento y la fuerza.
• Deporte de alto rendimiento: Mejora de la fuerza, potencia, resistencia y recuperación muscular en deportistas de élite.
• Estética y belleza: Mejora del contorno corporal, combate la celulitis y reafirma los músculos.
• Medicina deportiva: Prevención, tratamiento y mejoras de contusiones deportivas.

Tipos de electroestimuladores.

Existen diversos tipos de electroestimuladores, cada uno con características y aplicaciones específicas:

• Electroestimuladores TENS (estimulación nerviosa eléctrica transcutánea): Utilizados principalmente para el alivio del dolor.
• Electroestimuladores musculares (EMS): Diseñados para estimular la contracción muscular y mejorar el tono muscular.
• Electroestimuladores combinados: Los modelos combinados ofrecen ambas funciones.

¿Cómo elegir un electroestimulador?

Al elegir un electroestimulador, es importante considerar los siguientes factores:

• Intensidad: La intensidad de la corriente eléctrica debe ser ajustable para adaptarse a las necesidades individuales.
• Frecuencia: La frecuencia de los impulsos eléctricos determina el tipo de contracción muscular.
• Tipo de corriente: La elección del tipo de corriente dependerá de la aplicación deseada.
• Número de canales: Determina la cantidad de grupos musculares que se pueden estimular simultáneamente.
• Accesorios: La disponibilidad de diferentes tipos de electrodos y accesorios puede ampliar las posibilidades de uso.

Consideraciones importantes

• Personalización: Cada paciente requiere un protocolo de tratamiento personalizado, teniendo en cuenta el tipo de lesión, la gravedad y la fase de rehabilitación.
• Supervisión: Es fundamental que la electroestimulación sea realizada bajo la supervisión de un fisioterapeuta o profesional de la salud cualificado.
• Contraindicaciones: Existen ciertas contraindicaciones para el uso de la electroestimulación, como la presencia de marcapasos, embarazo, trombosis o inflamación aguda.

El futuro de la electroestimulación.

El futuro de esta técnica se presenta prometedor, con avances tecnológicos que permitirán:

• Electroestimuladores más portátiles y fáciles de usar: Dispositivos más pequeños y discretos que se pueden utilizar en cualquier lugar.
• Electrodos más cómodos y efectivos: Nuevos materiales y diseños que mejorarán la adherencia y la transmisión de la corriente eléctrica.
• Software más inteligente: Programas que permitirán personalizar los tratamientos de manera aún más precisa y eficiente.
• Integración con otras tecnologías: Combinación de la electroestimulación con otras terapias como la realidad virtual o la estimulación magnética transcraneal.

Nuevas aplicaciones:

• Neurorehabilitación: Tratamiento de afecciones neurológicas como el ictus y el Parkinson mediante la recuperación de habilidades perdidas y el desarrollo de nuevas estrategias de adaptación.
• Medicina regenerativa: Estimulación de la regeneración de tejidos.
• Aumento del rendimiento deportivo: Desarrollo de protocolos específicos para cada deporte y nivel de competición.

En conclusión, la electroestimulación es una técnica terapéutica con un gran potencial para mejorar la salud y el bienestar, es decir, al estimular la contracción muscular y mejorar la función neuromuscular, se contribuye significativamente a la recuperación funcional de los pacientes y por ende, mejora su calidad de vida. Por tanto, los avances tecnológicos y la creciente evidencia científica la posicionan como una herramienta valiosa en diversos campos de la salud como parte de un programa de rehabilitación integral y bajo la supervisión de un profesional de esta área.

Referencias Bibliográficas

• Electroestimulación: qué es, cómo funciona y cuáles son sus beneficios. I-Tech Medical Division. Disponible en: https://itechmedicaldivision.com/es/electroestimulacion/

• Guía de electroestimulación muscular: beneficios, contraindicaciones y resultados. EfisioterapiaShop. Disponible en: https://www.efisioterapia.net/tienda/blog/electroestimulacion_muscular_tipos_de_frecuencia_y_efectos.html

• La electroestimulación y sus beneficios en el entrenamiento y la recuperación. FisioFocus. Disponible en: https://www.fisiofocus.com/es/articulo/la-electroestimulacion-y-sus-beneficios-en-el-entrentamiento-y-la-recuperacion

• Técnica de Electroestimulación. FisioOnline. Disponible en: https://www.fisioterapia-online.com/glosario/tecnica-de-electroestimulacion